PAZ LIRA
Ontogenia / Instalación
“Ontogenia”, la nueva muestra individual de Paz Lira, trae al misterioso reino fungi al Centro Cultural de Las Condes a través de una monumental instalación con más de 1.300 obras en las que la artista retrata las complejas relaciones de los hongos entre sí. En ellas, se reflejan la magnificencia con la que colores, formas y texturas se forman en la materia en descomposición.
Con esta exposición, que estará abierta al público desde el 10 de octubre al 8 de diciembre, es un verdadero viaje visual que nos invita a contemplar la belleza de la descomposición y la vida efímera de los hongos, protagonistas del universo creativo de Lira, quien celebra 40 años de carrera.
La artista formada, formada en la Universidad de Chile, se ha dedicado en la última etapa a la experimentación en torno a la transmutación de la materia, al proceso de descomposición al que se enfrenta cualquier sustancia sometida a cambios ambientales o el paso del tiempo.
Ahora, luego de años de investigación, presenta Ontogenia, consistente en cientos de círculos de resina que registran la metamorfosis en distintos organismos vivos. Dispuestos en el espacio o bien sobre planos suspendidos, cada uno de los círculos representa una unidad diferente de la otra, aunque su origen sea el mismo, y cada uno puede leerse como una obra unitaria, aunque en su conjunto se estructuran como una gran instalación espacial.
Con el apoyo en la puesta en escena del reconocido escenógrafo Ramón López, esta muestra representa un punto de inflexión en la trayectoria de la autora, puesto que –a diferencia de sus anteriores muestras- aquí aparece el color y la geometrización de las formas. Su ideario y rigor sigue siendo el mismo, pero su vasto horizonte se amplía aún más
“La ontogenia es la historia del cambio estructural de una unidad sin que esta pierda su organización. Paz presenta historias de transformaciones mutuas, donde cada unidad conserva sus límites individuales, a la vez que se acopla a un nuevo cuerpo con cualidades formales propias”, explica la curadora de la obra, Carolina Arévalo.
Crédito fotos: Patricia Novoa.