SIMONE CHAMBELLAND

18 de marzo al 28 de mayo de 2023
Martes a domingo, 10:30 a 14:00 y 15:00 a 19:00 horas

Entrada liberada

Apoquindo 6570

Variaciones espaciales / Retrospectiva

La Corporación Cultural de Las Condes abre su Temporada de Exposiciones 2023 con una retrospectiva de la artista franco-chilena Simone Chambelland (París, 1911 – Santiago, 2012), que reivindica el lugar que tuvo en la escena plástica chilena de la segunda mitad del siglo XX.

La exposición Variaciones espaciales es una invitación a descubrir a una artista imperdible del siglo XX, que exploró y problematizó desde Chile el desarrollo de la carrera espacial, reflejo de las utopías y amenazas de la década de los sesenta, a través de un recorrido por sus construcciones figurativas y su preocupación por la composición y la relación entre las formas.

La muestra antológica cuenta con la curaduría de Luz María Williamson, quien llevó adelante un riguroso trabajo de investigación, que desembocó en una propuesta museográfica cargada de sensibilidad y justicia histórica. El proyecto fue financiado por FONDART 2022, a diez años de la partida de la artista, y cuenta con el apoyo de la Embajada de Francia.

El montaje contempla múltiples herramientas de accesibilidad para una mediación abierta a todo público, desarrolladas por un equipo liderado por Celeste Vilches, en conjunto con Asociación Crea. Al respecto el recién asumido director ejecutivo de la Corporación Cultural de Las Condes, Martín Vial Decombe, señala:

“Hoy es impensable construir cultura sin considerar la inclusión. Esta alianza con Crea nos abre infinitas posibilidades, demostrando que pequeños gestos pueden cambiar la manera de observar una exhibición. Por otra parte, la obra de Simone ofrece lecturas transversales, lo que ayuda enormemente en este cometido”.

LA ARTISTA

Simone Chambelland nació en París, estudió en L´ Ecole de Louvre y en Le Grand Chaumière y por aquellos años se casó con un joven arquitecto chileno, con quien tuvo dos hijos. En 1935 se radicó en Chile e ingresó como alumna libre a la Escuela de Bellas Artes de la Universidad de Chile.

Ella perteneció a la generación de mujeres artistas de la década de 1940, egresadas de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Chile, formando parte de un núcleo de artistas independientes y adelantadas en el arte chileno del siglo XX. Participó de la época fundacional del emblemático Taller 99 de Nemesio Antúnez.

En nuestro país conoció a quien sería su marido y cómplice por 73 años, José Ricardo Morales, académico y dramaturgo republicano arribado al país en el barco Winnipeg en 1939. Simone ilustró a lápiz y témpera los trajes y la puesta en escena para la adaptación que hizo José Ricardo de La Celestina, que se presentó en el Teatro Municipal en 1944, con gran reconocimiento de la crítica para ambos.

Las obras de Simone Chambelland forman parte de las colecciones del Metropolitan Museum of New York y New York Public Library, en EE.UU.; La Cabinet des Estamps, Bibliotheque Nationale, Galerie la Hune y La Nouvelle Graviere, en París, Francia; las galerías Aele y Esti-arte, en Madrid, España, y las colecciones de IBM y Museo Nacional de Bellas Artes, Santiago, Chile.

LA EXPOSICIÓN

La muestra está dividida en cinco secciones: “Ingenios voladores”, grafitos y grabados; “Máquinas despiadadas”, grabados; “Época oscura”, pintura y grabado; “Estudios”, ilustraciones y bocetos; “Cerámicas, esmaltes y matrices”.

De esa forma, se presentan los múltiples lenguajes expresivos de la artista, su aguda y reflexiva visión sobre el mundo y los seres humanos, y la constante tensión entre la utopía modernista y la amenaza autodestructiva que imperaba en los años sesenta del siglo XX. Además, la exposición cuenta con un módulo donde se recrea el Taller 99 que Simone Chambelland frecuentó desde 1962 a 1970. Toda su obra en grabado la desarrolló durante esos ocho años, del que dan cuenta sus 97 matrices en cobre.

El título de la muestra, Variaciones espaciales, nace del nombre que le dio Simone a una de sus más extensas y emblemáticas series de grabados y grafitos, que desarrolló en los años sesenta. Admirada por quienes osaban abandonar la tierra y aventurarse hacia el espacio, Simone imaginó un alunizaje en 1964, cinco años antes de que el Apolo 11 arribara a la Luna. Naves y objetos espaciales son emplazados en espacios de silencio, donde el blanco es vinculante, proyectando la imagen de un universo atravesado por resonancias cósmicas de planetas deshabitados.

José Ricardo Morales escribía “Antes de que los hombres pusieran sus plantas en la Luna, cuando pedir la Luna era pedir lo imposible, Simone se pasaba allí la vida… y antes de que las técnicas presentes nos descubrieran la otra cara lunar, ella la recorría de memoria”.

ACCESIBILIDAD SENSORIAL

La accesibilidad es uno de los pilares de la exposición: veinte fundamentales obras de Simone tienen una imagen táctil y audio descripción para personas ciegas o con baja visión (en códigos QR), además de cédulas en braille.

Además, todas las cédulas de la exposición están en macrotipo y se han dispuesto mapas de sala táctiles que indican donde están las herramientas de accesibilidad. Para complementar la experiencia, se ha implementado un recorrido sonoro a través de códigos QR y un mesón abierto a público con reproducciones en cobre de las matrices de la artista.